Estrella de piedra con palmeras en vez de cañones, con los baluartes sobre el mar, el Fuerte de São João da Barra, construido en la segunda mitad del siglo XVII para defender la barra de acceso al puerto de Tavira, quedó sin funciones militares tras el desvío de esa barra hacia oriente y la disminución de la hondura del canal.
Perdido entre el cielo y el mar, con sus murallas y imponente puerta de armas – que lo defienden ahora de la agitación turística del verano del Algarve – preserva en su interior un espacio de gran calidad: plaza de armas con pozo, estanques de piedra (encuadrada por las rampas de acceso a los cuatro baluartes y rodeada de cuarteles, caballerizas y depósitos de pólvora) y al fondo la casa del Gobernador, con capilla y terrazas en piedra.
Clasificado como inmueble de interés público, el Fuerte ha sido recientemente adaptado al Turismo de Naturaleza, con 10 cuartos destinados a huéspedes, según proyecto del Arquitecto Victor Mestre.
En el baluarte nordeste hay una piscina redonda capeada a piedra y en el baluarte sudeste, de cara al mar, los huéspedes podrán desayunar, observar los pájaros y asistir a la puesta de sol, así como utilizar un telescopio para observación astronómica, teniendo en cuenta las excelentes condiciones para ello (poca iluminación alrededor).
En la casa del Gobernador los huéspedes disponen de un comedor y de una sala de estar/música en la planta baja y de una sala de desayuno y bar en la parte superior abovedada de la antigua capilla, residiendo la familia de los propietarios en la primera planta. La decoración es austera, con muebles de época, pintura contemporánea – Pedro Chorão, Regina Chulam, Jaime Isidoro e Guilherme Parente, Teresa Magalhães, Nuno Siqueira, R.K. Bathnagar, Atul Sinha – y escultura de João Cutileiro y António Matos.
Tratándose de Turismo de Naturaleza – el Fuerte se encuentra en la Reserva Natural de la Ría Formosa – se ha apostado por la simplicidad de las instalaciones y el aprovechamiento de los recursos naturales siempre que ha sido posible (paneles solares, ventiladores, pavimentos radiantes, en vez de aire acondicionado). El Fuerte dispone de un barco para paseo por la ría y acceso a playas casi desiertas, con gran flexibilidad de horarios (teniendo en cuenta el número limitado de huéspedes), como de bicicletas e información sobre rutas pedestres.
En la zona es posible jugar al Golf (3 campos) y tener acceso a equipos de playa (sombrilla, bar de playa y ski acuático). El Fuerte está situado a 100 m. del pueblo de Cabanas (donde hay varios restaurantes, bares, cafés y tiendas de periódicos) a 10 km de Tavira (donde hay monumentos de interés y restaurantes de calidad), a 40 km del aeropuerto de Faro y a 200 km de Sevilla.